miércoles, 7 de octubre de 2009

Jesucristo Cazavampiros, pasión, muerte y resurrección


Título Original Jesuschrist Vampirehunter (2001)
Director Lee Demarbre 
Guión Ian Driscoll
Actores Phil Caracas, Maria Moulton, Jeff Moffet, Murielle Varhelyi, Ian Driscoll, Josh Grace, Tim Devries




Soy un gran amante del mal cine. Algunos de mis conocido, familiares y allegados s comparten conmigo esa oscura pasión por ver celuloide cutre, por encontrar la película perfecta, aquella que de tan inenarrable bordee la magnificencia de lo chabacano. Durante tal proceso he disfrutado de joyas como La Vampiresa Desnuda (Jean Rollin, 1971), Manos, the Hands of Faten (Harold P. Warren, 1966), Las Noches del Terror (Andrea Bianchi, 1981) que estaban a la altura de sus leyendas. Pero también he sufrido grandes decepciones como con la alabadísima Los Surfistas Nazis Deben Morir (Peter George, 1987) producida por la genial Troma Entertainmentobra sin ninguna gracia más allá de su original y simpático título.




Dentro de este colectivo de detritus cinematográfico Jesucristo Cazavampiros, de Lee Demarbre  e Ian Driscoll, es una verdadera joya, una humilde cumbre dentro del peor cine jamás filmado, un producto que de tan malo, tan jodidamente malo, parece haber sido rodado hace 30 años, cuando la fecha de su producción data de 2001. Un despropósito capaz de conseguir que el espectador no pierda la sonrisa en todo su generoso metraje por el cúmulo de sandeces técnicas y artísticas de las que son capaces sus máximos responsables.




Un diseño de producción digno del mal vídeo de una comunión, un guión intencionadamante risible con pasajes memorables en los diálogos, un reparto de actores indudablemente formado por colegas, familiares y compañeros de trabajo del director, este último, un señor capaz de ejecutar uno de los trabajos más horribles que se han visto en la historia de realización, pero dando pie a maravillosos pasajes cómicos que perduran en la retina largo tiempo. Cámaras lentas, cámaras aceleradas, indescriptibles escenas de lucha, "teología progresista", lesbianismo, vampirismo, wrestling, amor, erotismo debidamente pudoroso (lo queramos o no el film es de cariz religioso, ni una mala teta en la hora y media larga que dura la película) y acción , mucha acción desenfrenada, alocada y montada por un adicto al speed.




Pero hay un fallo en esta magna obra, y es que no es pura, ni inmaculada, está mancillada, manchada. Lo está porque se nota a la legua que el director ha rodado intencionadamente mal el film, que no es un nuevo Ed Wood que cree a pies juntillas que está cambiando la historia del cine con una película por la que daría la vida. Es cierto que con sólo de pensar que el tal Lee Damrbre rodó con orgullo esta oda al hijo de Dios, vuestro señor, a mí al menos mi corazón se llena de gozo, pero sé que él era consciente de que a lo que estaba dando forma era un enorme montón de mierda en celuloide y eso le resta puntos, que no méritos.




Pero que el malgino no os nuble la razón, Jesucristo Cazavampiros merece el mayor de los elogios. Por su cura punkie, por su referencia a los musciales, a Buffy Cazavampiros, a Jóvenes Ocultos, por homenajear en cada plano a la factoría Troma Entertainment, por ser un producción canadiense y sobre todo por honrar al Mesias, mostrándolo como un hombre moderno, tolerante, casto, experto en artes marciales, luchador posicionado del lado del bien bien, atento con sus padres (la llamada de la Virgen María es una escena antológica) capaz de dar la vida por nosotros para volver y seguir luchando contra los seres del averno que amenazan la creación de su padre.




De visión obligada para todo ser viviente o no muerto, creyente o ateo, una obra maestra de lo indescriptible, una genialidad que perdurará a través de los siglos, por su pasión, su crítica social (que ojo, la hay), su fuerza, su humor, su suspense y por ser una oda a la fe en el creador y en su hijo, que no bastando con su primera venida, regresó. A continuación dejo el trailer del próximo objetivo fílmico de hondo calado (nunca mejor dicho) que tiene pinta de dar un giro de 180 grados a mi vida como cinéfilo, estoy seguro.


Monsturd, the Attack of Mountain Shit



3 comentarios: