Director: Jason Reitman (2009)
Guión: Sheldon Turner & Jason Reitman basado en la novela de Walter Kim
Actores: George Clooney, Vera Farmiga, Anna Kendrick, Jason Bateman, Tamala Jones, J.K. Simmons, Danny McBride, Chris Lowell, Zach Galifianakis, Steve Eastin
Trailer
Terriblemente sorprendido me he quedado una vez más con la floja consistencia y poca maestria de otra de esas cintas que la crítica ha ensalzado a lo más alto, que los festivales han agasajado con nominaciones y premios y que en la taquilla ha funcionado bastante bien. No hay nada en Up in the Air que me haya llamada la atención lo más mínimo.
Típica y tópica, previsible, lineal, mundana. La tercera película de Jason Reitman es un cliché andante con ramalazos que mezclan The Office con Treinta y Tantos. Un humor simple que sólo esboza una mínima sonrisa en momentos muy puntuales, un poso dramático casi nulo y una fallida visión presuntamente profunda del mundo empresarial asediado por la bestial crisis a nivel global que nos asola desde hace unos años.
Personajes planos y estereotipados que no transmiten nada más que algo de simpatia. Increíble como están alabando a los tres actores principales de la cinta viendo un servidor que sus trabajos no superan en lo más mínimo la correccion. George Clooney una vez más hace de canalla con corazón, Vera Farmiga no nos dice mucho más que en Infiltrados o en la horrenda La Prueba del Crimen y la crepuscular Anna Kendrick no lo hace mal como joven estirada, pero no destaca de manera alguna.
Un guión sin chispa ni enjundia alguna, una dirección planísima de Jason Reitman (aunque esto no es novedad si vemos su anterior film). Si se me apura diría que a este film le quitas las estrellas del reparto, le pones un casting desconocido y sería uno más de los clónicos telefilms de sobremesa con los que nos asedia Antena 3 los fines de semana.
Up in the Air es una cinta profundamente snob que no dice nada. Si Juno me parecía una simpática pero sobrevalorada comedia, la cinta que nos ocupa me sirve para confirmar que Jason Reitman es junto a Judd Apatow el nuevo niño mimado de Hollywood más sobrevalorado de la actualidad y que debería haber tomado nota de la obra de su padre Ivan como artesano. Señor que hacía un cine menos pretencioso y decididamente más eficaz que su retoño, joven que admite no haber visto una película europea en toda su vida, se le nota, porque Jacques Tatí debe estar revolviéndose en su tumba ahora mismo.
Típica y tópica, previsible, lineal, mundana. La tercera película de Jason Reitman es un cliché andante con ramalazos que mezclan The Office con Treinta y Tantos. Un humor simple que sólo esboza una mínima sonrisa en momentos muy puntuales, un poso dramático casi nulo y una fallida visión presuntamente profunda del mundo empresarial asediado por la bestial crisis a nivel global que nos asola desde hace unos años.
Personajes planos y estereotipados que no transmiten nada más que algo de simpatia. Increíble como están alabando a los tres actores principales de la cinta viendo un servidor que sus trabajos no superan en lo más mínimo la correccion. George Clooney una vez más hace de canalla con corazón, Vera Farmiga no nos dice mucho más que en Infiltrados o en la horrenda La Prueba del Crimen y la crepuscular Anna Kendrick no lo hace mal como joven estirada, pero no destaca de manera alguna.
Un guión sin chispa ni enjundia alguna, una dirección planísima de Jason Reitman (aunque esto no es novedad si vemos su anterior film). Si se me apura diría que a este film le quitas las estrellas del reparto, le pones un casting desconocido y sería uno más de los clónicos telefilms de sobremesa con los que nos asedia Antena 3 los fines de semana.
Up in the Air es una cinta profundamente snob que no dice nada. Si Juno me parecía una simpática pero sobrevalorada comedia, la cinta que nos ocupa me sirve para confirmar que Jason Reitman es junto a Judd Apatow el nuevo niño mimado de Hollywood más sobrevalorado de la actualidad y que debería haber tomado nota de la obra de su padre Ivan como artesano. Señor que hacía un cine menos pretencioso y decididamente más eficaz que su retoño, joven que admite no haber visto una película europea en toda su vida, se le nota, porque Jacques Tatí debe estar revolviéndose en su tumba ahora mismo.
>le pones un casting desconocido y sería uno más de los clónicos telefilms de sobremesa con los que nos asedia Antena 3 los fines de semana.
ResponderEliminarHombre, tanto como eso... A mí me ha entrado con facilidad y me ha resultado agradable de ver.
¿Tópica? Sí. ¿Previsible? Bastante. ¿Sobrevalorada? Mucho. ¿Mala? En mi caso no la consideraría como tal, me ha hecho pasar un buen rato, al menos durante la primera mitad, el resto ha sido más flojo.
Pero bueno, lo que sí está claro es que podría haber pasado sin verla y podría haberme puesto Agora, que no la he visto todavía, pero era ya tarde y no podía ver una tan larga :P
Por cierto, me sorprendió la aparición de Sam Elliott, con el bigote como en The Big Lebowski y todo, aunque está muy desaprovechado y no es ni de coña el cowboy que da el discursito final...
ResponderEliminarDeberías haber visto Ágora, te lo juro por mis muelas. No me gustó Up in the Air porque no me aportó nada, me parece una película demasiado encantada de conocerse y exageradamente consciente de su inteligencia y supuesta visión crítica. Me dejó totalmente indiferente.
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