Paranormal Activity

Director: Oren Peli (2009)
Guión: Oren Peli
Actores: Katie Featherston, Micah Sloat, Amber Armstrong, Michael Bayouth, Mark Fredrichs, Randy McDowell, Ashley Palmer, Tim Piper

Trailer

Soy un gran fan del subgénero del falso documental o documental fictico o como hostias se llame. Cintas como Ocurrió Cerca de su Casa, El Proyecto de la Bruja de Blair o [REC·] me parecen cada una en su estilo obras interesantes por sus planteamientos atípicos y como en el primer caso incluso subversibos. Pero también es cierto que este tipo de films desatan tantos elogios como improperios, rara vez se andan los espectadores con medias tintas a la hora de evaluarlos.

Ayer vi en pantalla grande Paranormal Activity y mi conclusión es que no comprendo su éxito más allá de la publicidad viral dentro de la red y la mano de Steven Spielberg como productor. La cinta de Oren Peli no tiene absolutamente nada, ni de talentosa, ni de terrorífica y si me apuran no posee virtud alguna cinematográficamicanete hablando. Esto no es una película, es un vídeo casero tan aburrido como el de Paris Hilton.

Ni puesta en escena, ni intérpretes creíbles, ni dirección, nada. Sólo dos actores seguramente improvisando la mayoría de sus diálogos en un soporífero ejercicio de vacuidad en fondo y forma que no asusta, aburre, se vuelve alarmantemente repetitivo y que hace un mal uso de una fórmula que pocas veces falla, el sugerir en vez de mostrar.

La historia es típica y tópica, no inquieta y sólo en contadas ocasiones hace que el espectador se interese por lo que sucede en pantalla, en las escenas nocturnas, las demás son pura morralla que no enriquecen para nada la trama. Además lo de una entidad maligna que sigue a una chica desde su más tierna infancia para poseerla ya lo contó con mucho más estilo y aterradora certeza David Lynch en la cada vez más revalorizada Twin Peaks: Fuego Camina Conmigo.

Un truño señoras y señores, un pepino sin interés alguno que falla en todos sus apartados, dirección y guión inexistentes, y que sólo tiene de interés, un par de secuencias muy simples pero bien ejecutadas, el plano final y los pechos de la tal Katie Featherston, mucho más expresivos que su propio rostro, eso sí que era una actividad paranormal.